Hoy, hace una hora he recibido una llamada telefonica de una señora de Palma. Me contó que hacia 5 meses que le habian operado y habia acabado hoy la quimio. La semana que viene empezara con la Radioterapia.
Me dijo que desde que se ha operado no se separa de su almohada del corazon, que le ha dado un enorme alivio, que cuando la recibio se emociono muchisimo y que le hubiera gustado llamarme antes, pero no podia, porque cada vez que tomada el telefono se emocionaba demasiado, asi que esperó.
Quería darnos las gracias sinceras por lo que estamos haciendo, que no tenemos que creer que nadie este agradecido aunque no llamen ni escriben, la razón es que para ellas ... ES MUY FUERTE.
Ya se pueden imaginar que las dos acabamos llorando por teléfono, ella por emoción al agradecernos nuestro labor, y yo, pues no sé porque también me tocó el corazón al oírla.
Y es que a veces nos sentimos un poco tristes al hacer todos estos esfuerzos y no sabemos a donde van luego nuestras almohadas, y quien las recibe, y como las reciben... Pero créeme, que cuando recibes una llamada telefónica como esta, se olviden los años de lucha y sacrificios y te sientes muy agradecida tu mismo por haber podido ayudar a tantas personas que sufren, y se te llena el alma de alegría.
Es todo lo que quería deciros. Gracias a todas por vuestra labor y quédense aseguradas que hacen UNA ACCIÓN TREMÉNDAMENTE IMPORTANTE.
Micky
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